Para vivir no quiero
islas, palacios, torres.
¡Qué alegría más alta:
vivir en los pronombres!

La voz a ti debida, Pedro Salinas

miércoles, 18 de febrero de 2015

Proyección del documental "Febrero, el miedo de los galgos"


Desde el día 6 hasta el 17 de febrero, se ha proyectado en nuestro instituto el documental Febrero, el miedo de los galgos de la directora Irene Blánquez
Un documental independiente que narra la terrible situación que viven decenas de miles de galgos cada año en España y que ha sido galardonado con el Premio Huella de Oro 2014 al mejor documental de defensa animal. 

El día 6 de febrero, en el primer pase, tuvimos la suerte de contar con las voluntarias M.J y Teresa de la Asociación Galgos en familia  que vinieron acompañadas de dos preciosos galgos, Tequila y Othar. Ellas nos hablaron de toda la labor que realizan, desde el rescate hasta la puesta en adopción de los galgos, pasando por el apadrinamiento y las familias de acogida.
Sus palabras, el visionado del documental y las actividades realizadas nos han emocionado y concienciado de la terrible realidad de estos animales. 
El siguiente vídeo resume algunos de los mejores momentos. 




Desde el Facebook de la productora del documental, Waggingtale Films, han tenido unas palabras para nosotros. Pincha aquí

Agradecer la colaboración y apoyo de mis compañeros: Jesús Guzmán, Ana Barredo, Inés Guerrero, Eva González, Inma Máximo, Antonio García, Cristina Barrios y Antonio Paz, así como del director, Mario Galdeano y del jefe de estudios, Antonio Ruiz.  Sin ellos no hubiese sido posible realizar esta actividad. ¡Muchas gracias!

- Actividad realizada por Ana Barredo con su alumnado de 2ºB:
Padlet galgos 2ºB 

- Para leer más:
¿Todo el mundo quiere a los galgos? elmundo.es 
¿Qué hacen los galgueros con sus perros? eldiario.es

lunes, 2 de febrero de 2015

Parodia idiomática

Esta actividad la he trabajado con mi alumnado de 1º y 4º ESO. Se trataba de escribir un relato en el que utilizáramos muchos refranes, cuantos más mejor y que la historia tuviera sentido. 
Para ello trabajamos previamente los refranes y las frases hechas e hicimos una puesta en común de todos los que sabíamos.Y... ¡manos a la obra!
Estoy muy satisfecha de la creatividad de mi alumnado y de los resultados obtenidos. 
Aquí podéis leer algunos de los mejores.

- Alumnado de 1º ESO B/D utilizando la técnica de cadáver exquisito:

 Yo me asocié con Juan por aquello que más ven cuatro ojos que dos y porque lo que uno no piensa, se le ocurre al otro. Así que me dijo más claro que el agua, “tú has metido la pata”, porque Juan... ¡no tiene pelos en la lengua!

            Yo había metido la pata hasta el fondo, porque me caí de la bicicleta y me rompí una vértebra. Me había metido en la boca del lobo y mi madre me iba a matar.

            Un día nos fuimos a pasear y, como ya he dicho antes, Juan no tiene pelos en la lengua, cada vez que pasaba una persona le gritaba, “pareces un loco”, pero yo le decía, “no juzgues a un libro por su portada”, pero él como el que oye llover. Es cierto que metimos la pata y tiramos la casa por la ventana, pero es mejor prevenir que curar...

            La verdad, la verdad es que me asocié con Juan, porque culo veo, culo deseo y él tenía muchos secretos interesantes. Así que le intenté tirar de la lengua. Finalmente, no me dijo nada y le mandé a freír espárragos.

 



-Miguel Ruchko, 1ºESO-D:



Era mi cumpleaños, mi hermano y yo nos despertamos de repente, porque quien madruga Dios le ayuda y de tal palo tal astilla. Los dos pedimos desayunar pan con aceite y tomate, porque éramos uña y carne. Cuando salimos al jardín de nuestra casa vimos a un hombre. Me acerqué para saludarlo, pero mi hermano me tiró de la camiseta y me dijo, “las apariencias engañan”.

El hombre se dirigió hacia nosotros: -¡Hola, enanos!
Tenía la lengua sucia. Se fue y entró en nuestra casa como Pedro por su casa…

Más tarde, le tiré un poco de la lengua a mi madre, porque quería saber qué me habían comprado por mi cumpleaños, pero ella me contestó bruscamente que me fuera a freír espárragos. Cuando fuimos a comer tenía más hambre que un perro. Tomé filete de cerdo con patatas. ¡Estaba riquísimo!

Pasaron las horas, hice los deberes porque no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. Pasaron los segundos, los minutos, los días… Mi madre se olvidó de mi regalo de cumpleaños y se lo recordé. Ella nerviosa me dijo: -Es que tengo mucho trabajo.

Yo no me dejé engañar y le respondí: -Mamá, se pilla antes a un mentiroso que a un cojo.

 Al día siguiente, mi madre me compró un álbum digital con todas las fotos que me han hecho… ¡Mejor tarde que nunca! Les di un beso a mi madre y a toda mi familia, porque una imagen vale más que mil palabras.



- Gabriel Lotuffo, 1º ESO-C:


                     Mi amigo y yo

Eric y yo no somos ni tanto ni tan calvo. Nunca nos asociamos con gente mala, porque es mejor prevenir que curar. Nunca nos contamos mentiras, porque sino tendríamos gato encerrado entre nosotros. Y siempre que salimos por la Cala de Mijas, matamos dos pájaros de un tiro, porque damos una vuelta y merendamos. No ponemos ni peros ni peras. Siempre sabemos que lo bueno se hace esperar.



- Sara Valenzuela, 4º ESO-A:
 

Estas navidades, iba mi prima por mi salón como Pedro por su casa, cuando empezó a dar la lata. Se puso más pesada que una vaca en brazos con los regalos de Navidad. Ella empezó a armar la marimorena con que quería una Barbie, al rato, que si quería una Bratz, y ella ni chicha ni limoná. Mi madre decidió comprarle la Barbie, pero mi prima sabía que había gato encerrado, por eso se metió en la boca del lobo buscando el regalo por la casa. Lo puso todo patas arriba.



El día de Navidad, cuando había que abrir los regalos, a las doce del mediodía, a buenas horas mangas verdes, abrió la Barbie y se puso las botas gritando y diciendo que era más fea que Picio. Mi madre, con las cosas claras y el chocolate espeso, le dijo que a caballo regalado no le mires el diente, porque no hay mal que por bien no venga y la mandó a freír espárragos.




- Olivia Fensome, 4º ESO-A:



Fui de compras con mi madre y llevé mi paraguas, porque viendo las nubes tan oscuras era más claro que el agua que iba a llover.

Maté dos pájaros con una piedra, porque mientras estaba allí decidí comprar los regalos que me faltaban.

Encontré el coche que quería mi hermano, pero era negro y él lo quería en rojo, la mujer que trabajaba en la tienda decía que la semana que viene habría coches en negro, pero de todas formas lo compré, porque más vale pájaro en mano que cientos volando.

Cuando abra su regalo, espero que piense en esto: " A caballo regalado, no le mires el dentado". 

Cuando me monté en el coche, el cinturón se había roto, entonces volví a la tienda para comprar uno nuevo aunque ya estaba muy cansada, porque más vale perder un minuto de mi vida, que mi vida en un minuto. 


Si queréis leer más, pinchad aquí